Si se queda sin líquido, tendrá que ser reemplazado, porque se destruirá a sí mismo rápidamente (probablemente precedido por un fuerte ruido de molienda). Mientras tanto, mientras haya suficiente aceite de engranaje para mojar los engranajes estará bien.
En cuanto a la severidad, es común que los diferenciales desarrollen una “filtración” alrededor del sello frontal donde se conecta el eje de transmisión, o la junta donde las dos mitades se unen. Si se trata sólo de un “punto húmedo” en el diferencial, sin generar goteos reales de aceite, entonces no es un gran problema, sólo algo a lo que hay que prestar atención para asegurarse de que no empeore (gotas reales en el suelo).
Si se trata sólo de una “filtración”, o incluso una fuga muy lenta (donde se generan goteos, pero muy lentamente), entonces a corto/medio plazo, sólo se puede comprobar el fluido y rellenarlo periódicamente. En un vehículo viejo, esto podría ser una buena solución, sólo compruébelo cada vez que cambie el aceite del motor. En algunos vehículos, puede ser muy difícil comprobar el fluido, lo que hace que esta propuesta sea menos atractiva.
La reparación “correcta” sería hacer una revisión del diferencial, lo que implicaría retirarlo del vehículo, abrir el diferencial, instalar nuevos componentes de desgaste como cojinetes y arandelas de empuje, y luego volver a montarlo con nuevas juntas y sellos. El costo de las piezas sería de entre 100 y 300 dólares, y la mano de obra de entre 4 y 8 horas. No me molestaría con esto a menos que la fuga parezca estar empeorando, o esté dejando regularmente gotas en su camino de entrada.